sábado, 10 de enero de 2015

La Epidural

Es el único método que existe que ofrece una buena analgesia (alivio del dolor) a las mujeres en todas las fases del parto. Es una técnica invasiva porque para ponerla es necesario acceder al espacio epidural, entre las vértebras lumbares, y colocar un catéter (un tubito muy fino y pequeño) por el que va a estar pasando continuamente la solución con la medicación para el alivio del dolor.
Al hacer que desaparezca el dolor, muchas mujeres manifiestan que, viven su parto de forma más consciente y tranquila. Pero no está exenta de riesgos y las mujeres deben conocer cómo funciona y sus pros y contras (y posibles complicaciones). 


La analgesia o anestesia epidural no se aplicará en ningún caso hasta que la gestante haya sida examinada y evaluada por la matrona, el obstetra y el anestesiólogo; que deben constatar que no existe contraindicación para su aplicación y que la gestante ha otorgado previamente su consentimiento por escrito, después de haber sido informada.


La anestesia epidural, como he dicho antes, es un medio que puede ayudar a aliviar el dolor del trabajo de parto; pero no es imprescindible. Muchas mujeres, dan a luz hoy en día sin epidural.

En principio el momento en el que se aconseja ponerla, es una vez se ha instaurado el trabajo de parto: con contracciones regulares y una dilatación de unos 3-4cm. Siempre tiene haber un registro previo de la frecuencia cardíaca del bebé y de las contracciones de la madre.

La dosis justa es la que quita los dolores a la madre, pero le permite sentir las contracciones y colaborar en el parto. Este equilibrio, sin embargo, no es tan fácil de conseguir.


Las contraindicaciones para la aplicación de la anestesia epidural son:
  •          Infección local (lugar de la punción) o general.
  •          Trastornos de la coagulación y tratamiento con anticoagulantes.
  •          Trastornos severos del embarazo.
  •          Parto muy avanzado (8-9cm). No está indicada porque su administración conlleva más posibles riesgos que beneficios, llegado a ese punto de la dilatación  normalmente el parto finaliza en poco tiempo.
  •          Tatuajes que cubran la zona de punción.

De todas formas, cada caso será evaluado de forma individual por el equipo que atienda a la mujer en el hospital.

Una vez puesta la epidural la frecuencia cardíaca el bebé debe ser monitorizada de forma continua.



Al ser un procedimiento invasivo, tiene unos posibles riesgos o efectos secundarios; de los que siempre te informarán al pasar la consulta preanestésica, cuando te dan el consentimiento informado. Estos problemas pueden ser:
  •          Dolores de cabeza persistentes tras el parto.
  •          Bajada de la tensión arterial.
  •          Dificultad para orinar espontáneamente.
  •          Temblores, náuseas, vómitos, picores.
  •          Fallos parciales a la hora de bloquear el dolor.
  •          Dolores lumbares en la zona de punción.
  •          Complicaciones a nivel del sistema nervioso central.
  •          Tiempo de expulsivo más largo, porque la madre suele perder la capacidad de pujo (de empujar).
  •      Malposición del bebé, al disminuir la movilidad de la madre, hay más posibilidades de que al bebé le cueste progresar facilmente por el canal del parto.
  •          Punción accidental de un vaso sanguíneo, lo que obliga a volver a realizar una nueva punción.
  •          En la mayoría de las hospitales, la madre deberá permanecer encamada. (Salvo en los casos de Walking-Epidural, que usan dosis de anestésico menores, que le permiten a la madre andar, aunque puede que la madre siga notando las contracciones dolores pero mucho menos.)
  •      Incremento del riesgo de sufrir fiebre intraparto.

                

Publicado por: Laura C.

No hay comentarios:

Publicar un comentario